Cada vez se oye hablar más de energías renovables y más concretamente de la energía solar; si navegas por internet encuentras muchas paginas web que te dicen cómo calcular una instalación solar y tal vez llegues a entender algo sobre sus elementos, pero poco más.

He consultado algunas de ellas y me he dado cuenta de que se puede hacer algo más claro y sencillo. Siempre que topo con una, me entran ganas de intentar explicarlo de otra manera y no es que yo sepa más que el otro, sino que con un enfoque diferente podría quedar mucho más claro. Por fin me he decidido a escribir algo al respecto, a ver si lo consigo.

P​ara comenzar: ¿qué consumo habrá?

​Empecemos con los puntos principales que debemos definir: uno es el consumo diario que podamos tener, como puede ser las luces que encendamos, las horas que vemos la tele… y otro es cuánta energía máxima iremos a gastar de pico en un momento dado.

Es fundamental aclarar y definir bien estos dos conceptos ya que nos van a permitir establecer la capacidad de las baterías y calcular la potencia de nuestro inversor respectivamente.

Pero bueno, vayamos por partes y empecemos por el principio.

​​​​​​¿​QUÉ ELEMENTOS TENDRÁ LA INSTALACIÓN?

La lista de los elementos necesarios para realizar una instalación fotovoltaica es la siguiente:

1 – Inversor.
2 – Placas solares.
4 – Baterías.
3 – Regulador

Voy a contarte más información de cada elemento:

INVERSOR

Para establecer la potencia del inversor que vamos a comprar yo siempre pregunto lo siguiente: si haces el contrato de la luz con una compañía lo primero que te preguntan es: ¿de cuántos kilovatios (KW) lo quieres? A esta pregunta solo puedes contestar tú mismo. ¿Qué pasa si te hacen un contrato de, por ejemplo, 1.5KW?
Pues que en cuanto la suma del consumo que estés teniendo en un determinado momento supere este valor te saltará el automático de la compañía; o sea que si enciendes unas bombillas, enchufas un cargador de móvil, el equipo de música y muchas otras cosas pequeñas no pasa nada, pero si sigues sumando puede que llegue un momento en que salte el automático.

Bien, si este concepto está claro ya sabrás de qué potencia va a ser tu inversor.

Para terminar de aclarar el concepto diremos lo siguiente: la elección del inversor hará que el aparato salte de vez en cuando, muy a menudo, o nunca dependiendo de cuánta potencia tenga.
Está claro que si queremos usar un secador no nos conviene tener menos de 1.5KW, ya que cualquier secador será fácilmente de esta potencia o más ( a no ser que lo usemos sin aire caliente).
El hecho de que necesitemos encender las luces muchas horas al día, que queramos tener la música siempre puesta o cosas así no nos interesa a la hora de establecer la potencia del inversor.

Naturalmente, si compramos uno de 5KW todo queda resuelto…
¿Pero de verdad crees que es lo mejor?

Hay una serie de razones por las que, aunque nos lo podamos permitir, no es conveniente hacer esto. En nuestros cursos este punto es de suma importancia ya que no es cuestión de “caballo grande ande o no ande”, más bien de dimensionar correctamente toda la instalación. Pero poder, se puede instalar.

Hay diferentes tipo de inversores, de onda cuadrada o senoidal pura; en el Taller Energías Renovables y Electricidad para tu casa, vemos las diferencias entre uno y otro. De todas formas, el segundo es más aconsejable.

BATERÍAS

Para que un inversor funcione en principio son necesarias una o más baterías.
El inversor hace que tengamos los 220V en nuestra casa y en nuestros enchufes, y para ello la capacidad de la batería no es determinante: una batería pequeña puede hacer funcionar perfectamente un cacho inversor de 5 KW sin ningún problema.

La pregunta es: ¿cuánta autonomía quiero tener en mi instalación? Trataré de explicarlo mejor.
Sabemos bien que mientras haya sol habrá energía, y por consiguiente nuestro inversor puede funcionar incluso sin batería, sí​, he dicho bien, sin batería.
La cuestión es que cuando se va el sol, si no tenemos batería en la que se acumule la energía, nos quedaríamos sin luz.

En consecuencia, si tenemos un acumulador pequeño conseguiremos extraer energía durante poco tiempo, mientras que si tenemos grandes acumuladores podemos disponer de energía semanas y semanas incluso sin que haya sol…

Ahora nos encontramos con un pequeño problema, y es que la capacidad de una batería se mide en Ah y no en Wh, ¿qué hacer? Usando la ley de ohm (tema importante del ​Taller de Energías Renovables) podemos realizar la conversión y saber cuantos Ah necesitaríamos para abastecer nuestra instalación por un día si no hay sol.

I (A)= P (W)/V (voltaje de la batería, consideramos 12V)

480/12=40Ah

Ahora hay que hacer una serie de consideraciones, la más importante es que usando una batería que tenga tan solo 40Ah haríamos que se quede a cero en un día, lo cual no es conveniente.

Siempre hay que procurar que la capacidad de la batería no baje mas del 30-40%, de lo contrario, su vida útil se reduciría mucho.

¿Entonces qué hacer? Simplemente duplicamos los amperios. Bueno, tenemos 80Ah, pasa un día sin sol y la batería se queda al 50% ¿y si hay otro día sin sol? Pues nos encontraríamos otra vez con el mismo problema…

En fin, se trata de ir aumentando ese valor hasta conseguir tener la autonomía que queremos y evitar que la capacidad de la batería baje mucho. Por todo esto que estamos diciendo viene muy bien tener en cuenta una serie de detalles, como por ejemplo, que usemos la energía cuando haya sol y evitamos, en la medida de lo posible, utilizar grandes consumos de noche, ya que mientras con sol chuparemos corriente directamente de la placa, de noche lo haremos de la batería.

En cuanto a la elección entre 12-24 o más voltios, el criterio general es que para instalaciones de poco consumo, como una casa de fin de semana, 12V es suficiente. A mayor consumo mayor voltaje; para la vivienda habitual puede ser adecuado 24V y para una empresa donde haya mucho consumo incluso es aconsejable 48V. Obviamente el inversor será del mismo voltaje de entrada. La cuestión del tipo de batería lo explicamos detalladamente en el ​Taller.

PANELES FOTOVOLTAICOS.

La comparación que suelo hacer siempre es la de un depósito (acumulador) y un grifo (placa fotovoltaica). Aunque es posible rellenar un gran depósito de agua con un pequeño grifo, tardaríamos semanas; lo mismo puede decirse de una placa pequeña y una gran batería.

 Y automáticamente surge la pregunta: ¿y si le metemos un montón de placas?

Según mi experiencia, puede ser 100W de placa por cada 100Ah de batería. Un punto importante es que las placas y las baterías pueden ir añadiéndose sobre la marcha según la necesidad. Por ello será conveniente dominar mínimamente las conexiones en serie y en paralelo, dependiendo de la instalación.

Si quieres saber más: Ver Taller Energías Renovables y Electricidad para tu casa